Se negaron atender a parturienta
Por violencia obstétrica condenan a dos médicas pagar indemnización de 132 mil bolívares
El feto falleció tras una espera de 24 horas para que le realizaran la cesárea a la víctima
En virtud de las pruebas presentadas por el Ministerio Público,
fueron condenadas a pagar 132 mil 894 bolívares las médicas obstetras
Andreína Pérez Ocando (30) y Tibisay Polanco Pirela (49), por haberse
negado a atender de manera oportuna la cesárea de una mujer de 35 años
de edad.
Dicha negativa ocasionó la muerte del bebé en el vientre de su madre
el 26 de noviembre de 2011, en el área de emergencias del hospital
general Adolfo D´Empire ubicado en Cabimas, estado Zulia.
La fiscal 47º de esa jurisdicción, Maribel Carrillo, ratificó la
acusación contra las médicas por la comisión del delito de violencia
obstétrica, previsto y sancionado en los artículos 51 y 15 de la Ley
Orgánica sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia.
El artículo 51 se refiere a la no atención oportuna y eficaz de las
emergencias obstétricas; mientras que en el artículo 15 se tipifica la
violencia obstétrica como una de las formas de violencia de género
contra las mujeres, estableciéndose en el numeral 13 el trato
deshumanizador, “en un abuso de medicalización y patologización de los
procesos naturales, trayendo consigo pérdida de autonomía y capacidad de
decidir libremente sobre sus cuerpos y sexualidad, impactando
negativamente en la calidad de vida de las mujeres.”
Luego de evaluar las pruebas presentadas por el Ministerio Público,
el Tribunal 2º de Juicio de Zulia con competencia en Defensa para la
Mujer dictó la referida sentencia para Pérez Ocando y Polanco Pirela,
quienes tendrán que pagar 371 unidades tributarias cada una; además de
una indemnización a la víctima por 250 unidades tributarias, lo cual
totaliza 132 mil 894 bolívares.
De acuerdo con la investigación, a las 12:40 de la madrugada del 26
de noviembre, la mujer de 33 años, con 35 semanas de gestación, fue
trasladada por sus familiares al referido centro asistencial por cuanto
presentaba dolores de parto.
El personal médico asentó el ingreso de la parturienta en libros del
área de emergencias a la hora antes referida de la madrugada; sin
embargo, la cesárea se la practicaron a las 3:00 de la tarde del 27 de
noviembre cuando el feto ya carecía de signos vitales.
Los familiares denunciaron el caso ante el Cuerpo de Investigaciones
Científicas, Penales y Criminalísticas, por lo que el Ministerio Público
coordinó las indagaciones, lográndose determinar la responsabilidad de
ambas galenas.